
Otro dragón japonés, proveniente de China.
Reúne interesantes particularidades, no solo por sus rasgos físicos, sino por sus diversas vinculaciones con sistemas de referencia, condiciones climáticas, elementos de la naturaleza y planetas del sistema solar.
Dragón Seiryu

Representa el agua, el este, la madera, el planeta Júpiter y la primavera.
Vive en el cielo oriental. Su apariencia es algo sin igual, combina los colores verde y azul, tiene cuernos y caballeros dorados. Es considerado uno de los cuatros monstruos divinos y un espíritu guardián de la ciudad de Kioto.
Ahora bien, sin duda, uno de los mejores atributos de este dragón es su relación con la creatividad y la benevolencia. Es una criatura bonita por dentro y por fuera.
A Seiryū no hay que temerle. Todo lo que gira con relación a este, es bueno. Se dice que siempre fue un dragón muy comprensivo con el sentir humano, muchos lo adoraban y buscaban su bendición.
Se le consideraba un dios protector, que cada vez que surcaba el cielo, en la tierra reinaba la felicidad.
Si te atrae la personalidad de este dragón y quieres conocerlo, anímate a visitar el templo de Kiyomizudera en Kioto, Japón. Lo verás en una estatua y disfrutarás de la ceremonia en su nombre.